miércoles, 15 de mayo de 2013

LAS SUPERSTICIONES DE LA SAL


Tirar la Sal
La sal es un elemento de la tierra, un compuesto de sodio que desde la antigüedad se ha considerado protectora frente al maleficio y la portadora de buena suerte. Puede que esta superstición esté relacionada con la importancia de la sal como conservante de alimentos (salazón...) Además la sal simboliza la alianza del hombre con la divinidad. Este último aspecto queda destacado en la Biblia (Lev. 2, 13). En la antigüedad fue usada como dinero de hay proviene la palabra Salario

Se cree que cuando hay sal en una casa siempre habrá dinero y si se echaba sal en los rincones de las cuadras el día primero de abril se evitaban las enfermedades del ganado.
Para contrarrestar el mal de ojo se bañaban en agua con sal las plantas de los pies y las palmas de la mano tres veces, se bebía tres sorbos del agua salda y después se echaba al fuego lo que quedaba de dicha agua.

Hay sin embargo un remedio para conjurar la mala suerte: echar una pizca de sal por encima del hombro izquierdo, porque de este modo se ciega al diablo y a los malos espíritus, o tirar agua por la ventana.
 
Es de mal agüero derramar de forma involuntaria la sal o que se caiga un salero: el responsable de ese fatal descuido verterá tantas lágrimas como granos de sal se hayan desperdigado. Pretenden algunos que esta creencia procede de la Última Cena, en la que Cristo derramo la sal.

Quién pisa la sal derramada tendrá disgustos y si se trata de alguien que va a casarse pronto, no cumplirá este propósito. Aquel que persiga quebrantar la felicidad de unos recién casados le basta con echar sal en el lecho nupcial.

- Otro más es que si se pasa sal de mano en mano golpearas a esa persona.